Aún recuerdo cuando lo vi primero en una de las revistas de videojuegos que me compraba de pequeño, la Superjuegos si mal no recuerdo, y que me lo compré para ordenador por unas ocho mil pesetas.
Qué recuerdo cuando, por fin instalado el juego, me encontré con esto:
Brutal. Lo que también recuerdo es cuánto me cagué en todo porque mi patata de ordenador apenas podía con el juego y me iba lento de cojones. Tuve que esperar a mi siguiente ordenador para poder jugarlo como dios manda.
Entonces SI que disfruté. Esa ambientación, esa banda sonora, esa forma de jugarlo. Y la historia, cómo se iba revelando todo, las vueltas de tuerca.
Aun recuerdo que me daba algo de miedo cuando me lo intentaba pasar en el viejo, que después estaba ya más curtido, sobre todo en la catedral, con los vampiros araña trepando por ahí y saltándote encima sin avisar. Qué asco daban.
No me extraña que digan que este juego es un clasicazo. Los que lo hayáis jugado sabréis entenderme. Luego estaban el 2 y el Defiance, que sin ser tan buenos como el primero, mantenían el ritmo en lo que a historia se refería, y luego van y la dejan sin cerrar para hacer más y más Tom Raiders, y yo con las ganas de saber qué coño ha pasado con Raziel y Kain. Serán mamones.
Eso me ha recordado ESTO. Es una bola, pero lo cierto es que por un momento me lo creí.
Y esto me ha recordado esto otro:
Después de darle vueltas al tema me han entrado ganas de pasármelo otra vez, aunque antes tendré que encontrarlo, que lo tengo por aquí por casa pero no recuerdo dónde.
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